El Gobierno ultima una liberalización del comercio por ’zonas especiales’

Entre las reformas que está preparando el Gobierno para estimular la economía, la liberalización del comercio minorista es una de las prioridades que se ha marcado el Ejecutivo y para la que está ultimando ya las negociaciones con las comunidades autónomas y las organizaciones representativas del sector con el objeto de intentar aprobar la nueva normativa antes del próximo mes de agosto.

Unas negociaciones que se están desarrollando bajo una premisa: liberalización de horarios y aperturas del comercio habrá sí o sí, pero ma non troppo. Es decir, que se buscará una fórmula intermedia entre el mínimo de ocho aperturas anuales que fija la actual Ley de Comercio y la libertad total que acaba de aprobar Madrid.

En la búsqueda de este equilibrio, la propuesta en la que trabaja la Secretaría de Estado de Comercio se orienta hacia la ampliación de las denominadas "zonas especiales" o "zonas de gran afluencia turística", para incluir a grandes capitales, especialmente aquellas con tráfico portuario de pasajeros como Barcelona o Málaga, entre otras.

Además, se ampliarán también los conceptos exigibles para la declaración de estas zonas turísticas con objeto de que puedan tener posibilidad de acogerse a ellas el mayor número posible de municipios.

Entre las organizaciones participantes en las negociaciones con la administración comercial se asegura que, entre estos nuevos conceptos que la nueva normativa incluirá como elemento favorable para la declaración de zona turística, está la ubicación de casinos o establecimientos similares, para allanar el camino a la instalación en España del proyecto de Eurovegas, que no tendría problemas en Madrid, pero que podría verse muy limitado en caso de que la opción de el magnate del juego Sheldon Adelson fuera Barcelona.
El objetivo es Barcelona

En el caso de la Ciudad Condal, otro elemento fundamental para forzar su inclusión como zona de gran afluencia turística es su importante tráfico marítimo de pasajeros, que la convierte en un punto esencial para fomentar el shopping o las compras como atractivo turístico. Una fórmula que se inició en Londres, que ha adoptado ya Madrid y que se ha convertido en un importante elemento dinamizador de la actividad comercial en las ciudades que han apostado por la libertad de aperturas en festivos.

Concretamente Barcelona y Málaga fueron las dos ciudades a las que, dicen, aludió el presidente de El Corte Inglés, Isidoro Alvárez, durante una de las reuniones que los grandes empresarios españoles mantuvieron con altos representantes del Gobierno. Al parecer, y según comentan algunos de los asistentes a ese encuentro, el dirigente empresarial expresó su malestar por el hecho de que los buques rusos llegaran a los puertos de ambas capitales cargados de turistas con poder adquisitivo y El Corte Inglés esté cerrado.

Este argumento coincide con la posición que defienden el actual equipo de Comercio y el Partido Popular, que consideran difícilmente justificable que los turistas que desembarcan en capitales de Italia o Francia gasten su dinero en los comercios de nuestros competidores turísticos, mientras que cuando llegan a España se encuentran con las puertas cerradas.
Más negocio y más empleo

Además del incentivo turístico, el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, ya ha explicado en varias ocasiones que los estudios de que dispone la Administración muestran que son las comunidades autónomas que tienen mayor libertad comercial y más días de aperturas las que están teniendo mejores resultados en actividad, negocio y empleo.

Para el secretario de Estado es "ilógico" mantener restricciones al comercio en un mundo en el que Internet permite comprar las 24 horas del día y los 365 días del año.

En la actualidad España es uno de los países más restrictivos de Europa en materia de horarios comerciales, sobre todo después de que Italia y Portugal hayan aprobado recientemente la libertad total de horarios y de aperturas.

De hecho, la idea de la Secretaría de Estado era ir hacia una libertad total de horarios y aperturas, en sintonía con la nueva ley de libertad de horarios comerciales de Madrid, que entrará en vigor el próximo día 13 de julio y cuyo impacto en el empleo lo han confirmado ya los propios responsables de los centros comerciales, que han anunciado la creación de unos 6.400 nuevos puestos de trabajo en toda la Comunidad para poder ampliar su horario.

En paralelo a la liberalización comercial, la Secretaría de Estado de Comercio tiene ya prácticamente ultimado el proyecto de ley de Unidad de Mercado.